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La solución a las inundaciones podría estar en el hormigón de nuestras calles

Profesores y estudiantes de la Universidad de Puerto Rico (RUM) han descubierto una posible solución a las constantes inundaciones que sufren muchos municipios en época de lluvias. El descubrimiento consiste en la construcción de espacios con hormigón permeable, que ha desarrollado el grupo estudiantil Hwang Eco-Friendly Development for Green Enviornment (HEDGE).

Según la doctora Alesandra Morales, del Departamento de Ingeniería Civil y Agrimensura y una de las investigadoras principales de este proyecto, «la idea es que el agua se achique a través del hormigón y así atacamos el problema serio que tenemos de inundaciones en la Universidad con tecnologías de bajo impacto ambiental y eco-amigable´´.

La RUM ya cuenta con diversos espacios en los que se ha instalado esta nueva tecnología, como por ejemplo una estación de bicis frente a la biblioteca y un gran proyecto, la remodelación de una plaza llamada Luis de Celis, que fue inaugurada hace algunas semanas.

El espacio mide más de 1.000 metros cuadrados y lo denominaron Previous Concrete Area 3. Para conseguirlo, tuvieron que nivelar la superficie de la plaza y lograr que la materia que habían inventado en su laboratorio tuviera la misma consistencia en un espacio abierto de grandes dimensiones.

Su invento, además de luchar contra el grave problema que pueden suponer las inundaciones, facilita la accesibilidad a las personas con movilidad reducida, por lo que se han marcado dos importantes tantos con un solo invento.

Según Marleisa Arocho, estudiante graduada del Departamento de Ingeniería Civil y participante en el proyecto, «todas las pruebas que hemos hecho han demostrado que aparte de reducir el volumen de agua que producen las inundaciones, también limpia significativamente la calidad del agua´´.

Para lograr la permeabilidad del hormigón, los estudiantes tuvieron que nivelar todo el terreno donde iban a construir. Después colocaron una geomembrana, que permite que cierta cantidad de agua se retenga en un área de almacenamiento y no se filtre de manera inmediata, para así poder realizar análisis de dicha agua.

Después colocaron grava de cinco centímetros de grosor y encima le colocaron una malla protectora para que no subiera en sedimento una vez estuviera abajo. Por último, se le colocó una loza del hormigón permeable de unos 15 centímetros de grosor que ellos mismos optimizaron en el laboratorio y que lograron variando los porcentajes de los materiales y sustituyéndolos por otros.

Según la doctora Morales, el beneficio que se ha conseguido extraer de esta iniciativa, tiene un valor incalculable; ‘’Tenemos a estudiantes a los que estamos fomentando esa semillita de investigación para que sigan estudiando; tenemos también estudiantes ya graduados que han dedicado sus tesis completas en este proyecto y se le han abierto puertas para visitar otras universidades y poner el nombre de Puerto Rico en alto y para nosotros los profesores nos da las herramientas de discutir temas innovadores en las clases. Traer a clase nuevas tecnologías para que los estudiantes se sientan motivados para tratar de crear medidas que nos ayuden en el ambiente”, comentó.

Sin duda, esta nueva iniciativa evitará muchos accidentes y desastres derivados de las inundaciones, donde todos los años pierden la vida muchas personas. En España, aún no está previsto que llegue este invento, pero seguro que, si resulta fructífero, pronto podremos pisar ese nuevo hormigón permeable en nuestras calles.