Aunque las tuberías están hechas de materiales resistentes, las mismas tienden a verse afectadas por diversos factores que hacen que estas se dañen. Por eso, tal vez te hagas la pregunta, ¿cómo puedo saber si mis tuberías están dañadas?

En verdad esto es un poco difícil de determinar, pero no imposible. Por esta razón, hoy te daremos algunas pistas que te ayudarán a saber si hay alguna tubería dañada en tu hogar. 

¿Para qué sirven las tuberías?

El sistema de tuberías de un hogar son un conjunto de cilindros que conducen agua o líquidos hacia una red de alcantarillado. Esto con la finalidad de sacarlos por completo de la propiedad y hacer que se vayan hacia un centro de descarte masivo.

Estos tubos se encuentran hechos en diversos materiales según su tipo, aunque en su mayoría son altamente resistentes. Ninguno es totalmente indestructible y pueden perder su solidez con el paso del tiempo.

¿Cómo es el funcionamiento de las tuberías?

El funcionamiento de las mismas varían según las etapas y el fin con el que fueron instaladas. Pero, en su mayoría, el sistema de funcionamiento es el siguiente:

1. Primero el agua se vierte en el desagüe.
2. Luego atraviesa el sifón, donde se quedan la mayoría de los residuos y los malos olores.
3. Luego llegan a las tuberías, en las que se dirigen al sistema de alcantarillado común de la zona.

En el caso de los fregaderos, los sifones se encuentran situados justo debajo de los mismos. Pero, en el caso de los sifones correspondientes al inodoro o duchas, se ubican de forma subterránea bajo el pavimento de las construcciones. Los cuales son más complicados de reparar en caso de que se dañen.

¿Por qué se originan daños en las tuberías?

La verdad es que son muchos factores por los cuales se pueden dañar las tuberías. Por lo que saber si mis tuberías están dañadas y sus causas es complicado de descifrar.

No obstante, la gran mayoría de las fallas en tuberías son a causa de una mala instalación, obstrucciones, un flujo de agua demasiado fuerte para el material de la tubería o daños producidos con el tiempo.

Sea cual sea el problema, lo que sí es seguro es que una falla de tubería genera grandes problemas para la edificación afectada. Y, por consiguiente, para los usuarios o habitantes de la misma. 

Por lo cual, es necesario saber si tus tuberías están dañadas lo antes posible para buscar una solución al problema.

¿Cómo se puede saber si mis tuberías están dañadas?

Para nuestra suerte, las tuberías dañadas siempre generan una cantidad de pistas rastreables que nos indican ciertos problemas en su funcionamiento. Y estas son las siguientes: 

Aparición repentina de humedad en el suelo

Cuando las tuberías subterráneas se rompen, se generan fugas de agua que humedecen las áreas cercanas a ellas. Si notas una aparición repentina de humedad o agua que sale del suelo, es un fuerte indicador de que una de las tuberías se rompió.

Sonidos de agua en movimiento provenientes del inodoro

Si el inodoro no está siendo usado en algún momento y notas que se percibe un sonido de agua en movimiento, llama a un fontanero porque algo anda mal.

Agua o humedad procedente de las paredes

Si tu hogar o edificio cuenta con tuberías incrustadas en las paredes y notas una humedad extraña, puede que una de ellas de haya todo. 

Por lo general, estas suelen ser manchas oscuras que empiezan a emerger, las cuales pueden dañar la pared rápidamente.

El grifo de agua fría proporciona agua templada

Este tipo de fallas es muy común y se origina a causa de la constante presión de agua que soportan estas tuberías. Es uno de los problemas más fáciles de arreglar, pero no debe ser pasada por alto.

¿Las tuberías obstruidas cuentan como tuberías averiadas?

Aunque una obstrucción es un fenómeno bastante usual e incómodo en las tuberías, no cuentan como una avería. No obstante, las mismas deben ser solucionadas de manera inmediata para evitar daños mayores. 

También porque las mismas imposibilitan el paso correcto del agua o líquidos por el desagüe.

¿Por qué se genera una obstrucción?

Las obstrucciones pueden originarse a causa de una gran variedad de factores, pero todos son causados por el uso descuidado o falta de mantenimiento de estas.  Algunas de sus causas son las siguientes:

1. Bolas de pelos formadas en la tubería.
2. Obstrucción provocada por desechos de comida o sedimentos.
3. Sarro o compuestos acumulados con el paso del tiempo.
4. Grasa adherida a las paredes.
5. Pedazos de papel atascado en el sifón.
6. Materiales sólidos presentes y acumulados en la tubería.

¿Cómo se evitan las obstrucciones?

Aunque estas son casi imposibles de evitar en su totalidad, hay una serie de rutinas o conductas que podemos adoptar para disminuir el riesgo de que se generen. Y estos son los siguientes:

1. Evita tirar por la cañería restos de comida o compuestos sólidos.
2. No eches la grasa o los aceites por el desagüe.
3. Deja de desechar el papel higiénico por el inodoro y deposítalo en cestos de basura en su lugar.
4. Limpia periódicamente la ranura de la cañería para quitar cualquier sedimento o cabellos adheridos a él.
5. Evita que los pelos se vayan por el desagüe.
6. Realiza limpiezas periódicas de las tuberías con agua hirviendo, vinagre hirviendo con bicarbonato de sodio o agua caliente con sal.

¿Puedo arreglar mis tuberías dañadas por mi cuenta?

La respuesta es no, y la razón es que cada tipo de avería requiere de un procedimiento distinto. Habrá algunas que requerirán una ruptura del suelo para repararlas, otras deberán ser reemplazadas y en algunas será muy difícil detectar el problema.

Lo mejor siempre será llamar a los profesionales o personal de plomería para que proporcionen la mejor solución a nuestro problema. Ellos sabrán qué hacer y evitarán que todo el sistema de cañerías se vea afectado debido a una mala manipulación.

Y esto no es distinto en el caso de las obstrucciones. Sabemos que es complicado esperar a que lleguen los expertos, pero te aseguramos que será la mejor decisión que podrás tomar.