beber alcohol

Ingerir alcohol aumenta el número de bacterias en la boca

El ocio es uno de los elementos más importantes para las personas que actualmente están trabajando. Tras largas horas de ardua faena, nos apetece que lleguen los días libres para así disfrutar del tiempo libre solos o en compañía.

Una de las actividades que están más extendidas es la de salir de fiesta. Este hecho, suele ir asociado con la posibilidad de ingerir alcohol. Más allá de los efectos nocivos que tiene para distintos órganos de nuestro cuerpo, lo cierto es que aún hay más en los que se ahonda menos.

Los cánceres pueden ser provocados por el alcohol

Teniendo en cuenta un estudio publicado en una conocida revista americana, los hombres y mujeres que ingieren una o más bebidas diarias, tienen más bacterias de tipo oral relacionadas con diversas enfermedades. Estas patologías se relacionan con las encías, el corazón o diversos cánceres.

Beber es perjudicial a la hora de mantener la salud de nuestra boca y podría ser una de las explicaciones al por qué caer en vicios nocivos para la salud como beber o fumar, genera cambios bacterianos relacionados con cánceres y enfermedades crónicas. Para realizar esta investigación, se estudió a 1.044 estadounidenses, con una edad comprendida entre los 55 y los 87 años.

Todos pertenecían de dos ensayos de cáncer en curso a nivel nacional y se encontraban completamente sanos en el momento de inscribirse a cualquier estudio. Asimismo, aportaron muestras de su microbio oral, además de información al milímetro acerca de su consumo de alcohol. Se clasificaron genéticamente y se cuantificaron el número de bacterias orales entre l los 270 no bebedores, 614 bebedores moderados y 160 muy bebedores.

¿Cuáles fueron los resultados?

Aquellas personas que participaron bebedoras, tuvieron un número mayor de especias dañinas  de Bacteroidales, Actinomyces y Neisseria. Las acciones siguientes serán determinar cuáles son los mecanismos biológicos tras los efectos del alcohol en el microbioma oral.

Las razones de los desequilibrios microbiómicos existentes que tienen relación con la bebida, podrían consistir en que los ácidos de las bebidas alcohólicas, hacen hostil al ambiente oral para el crecimiento de según qué bacterias. Otro motivo, podría consistir en la acumulación de subproductos perjudiciales por causados por la descomposición del alcohol, incluidos los productos acetaldehídos. Estos, junto a las toxinas acumuladas en la boca del humo del tabaco, son producto de bacterias como Neisseria.

Beber es uno de los hábitos más extendidos en el mundo y a pesar de las campañas de concienciación, la edad a la que se empieza a beber alcohol es cada vez más temprana. Este, solamente es un dato más a tener en cuenta para reducir la ingesta de alcohol en nuestro organismo.